Te tragas tu llanto, escuchas y haces tuyo el…. ¡Callate, aguantese como los machos, Ya no llores, ha como friegas con lo mismo!, entre otras frases hereditarias que venimos arrastrando culturalmente.
Aseguras que no pasa absolutamente NADA, pero la realidad es que literalmente te estás tragando la emoción y para tu cerebro, existe una orden que indica que estás pasando un bocado e inmediatamente dá la orden al estómago de generar ácidos gástricos, obviamente al no haber nada en el estómago, inicia un cuadro de gastritis y lo que le sigue. Por ello es que sentimos el famoso “nudo en la garganta”.
Tu cuerpo grita desesperado a través de ansiedad y ésta se refleja con dolor de cabeza, movimiento constante de tus pies, el no poder estar quieto, dar vueltas en la cama, la rigidez de tu rostro, movimientos exagerados de tu cuerpo, falta de retención en la memoria, infecciones urinarias, molestia de la ciática y la lista es muy extensa.
Después de tanto callar, guardar y tragar tus emociones viene ese diálogo interno contigo mismo, donde cuestionas, debates y recriminas todo lo ocurrido y tú mismo tratas de responderte, justificando o maquillando todo aquello que te ha lastimado.
Nos enfermamos por guardar, sembrar y albergar aquellas cosas que no alcanzamos a digerir, intoxicando a todo nuestro organismo por medio del órgano mas importante en la distribución de la sangre….. nuestro CORAZÓN.
Todo el dolor que te generen las acciones de los demás, debemos manifestarlo, de lo contrario, cuando no decimos absolutamente nada, estamos enviando el mensaje de “trátame como se te pegue la gana, al fin que no hay problema!. Cada vez que permites ciertas acciones, le enseñas a la gente a como tratarte.
Y es precisamente aquí donde comienzas a descuidar tu salud, le das la prioridad a todos, menos a ti mismo, tú estás al último y eso…….. si hay tiempo.
Tu organismo, por naturaleza, está al pendiente de eliminar todas las células muertas, pero al dar paso al dolor, depresión, ansiedad, angustia, entre otras más, nuestro cuerpo omite estas células,dando lugar al cáncer. Algunos estudios médicos y científicos, afirman que algunas enfermedades psicosomáticas son derivadas de no saber tratar las emociones.
La diabetes, tiene su origen en la pérdida de la dulzura o felicidad, ya que el cerebro interpreta que ya no se requiere producir insulina, por la falta de lo dulce, el dolor de espalda se origina por cargar un exceso de compromisos y presiones, el dolor en riñones representa que te has aguantado muchos conflictos, el problema de la ciática indica que tienes miedo de dar un paso para tomar decisiones importantes y la lista es muy extensa.
¿Qué hacer para mitigar este problema? Expresar las cosas de manera tranquila y asertiva, de lo contrario, se irá acumulando tu molestia y está se manifestará a través del enojo o ira.
Escribir es una excelente opción, de esta manera analizas tus emociones, aplicas una retroalimentación a través de un soliloquio y puedes generar una reflexión que te permita entender y abrazar tu emoción.
Abraza, cada vez que una personas reparte o los recibe, se segrega oxitocina; una hormona que se relaciona con el placer, también se libera serotonina y dopamina, que se encargan del buen humor, lo que genera una agradable sensación de armonía y plenitud, una dosis cargada de bienestar para el cuerpo y el alma. Un abrazo dura en promedio 3 segundos y es mágico el cambio que genera en una persona.
¿Imagina un abrazo de 20 segundos?.
Su efecto es terapéutico sobre el cuerpo y la mente, un abrazo sana el alma, ayuda a mitigar el miedo y se interpreta como interés por la persona.
Bromea sin parar, la mayor parte del tiempo estamos serios, rígidos y deambulando comí zombies ya que nuestra mente está ocupada en los afanes y problemas cotidianos y nos olvidamos de reír…….
Ante diversas enfermedades, un antídoto fabuloso es el REIR.
Sí, en efecto el reir libera neurotransmisores segregados por la glándula pituitaria, como endorfina, dopamina y serotonina; las famosas hormonas de la felicidad, estas al complementarse con la edrenalina . La dopamina te motiva a repetir conductas que proporcionen placer, deseo y bienestar en general. Además, el reír reduce la hormona del estrés, denominada cortisol, de esta manera se minimiza el estrés y la depresión.
Consigue un confidente con el cual tengas confianza y puedas “vomitar” todo lo que te ha incomodado o lastimado, si no lo tienes, considera tomar terapia con un profesional que te escuche y te pueda guiar en la toma de decisiones y ordenar tus ideas.
También sirve hablar con un perro, un árbol, pero principalmente habla con Dios. Y no te empujo a una religión específica, lo importante es mantener una relación con Dios, por medio de leer su palabra, todo lo que está escrito dentro de la biblia, son palabras de sabiduría y lo maravilloso de esto, es que funciona si lo pones en práctica. Alimenta y procura acrecentar tu fe……..
Ejercítate; una buena opción para poder canalizar todo lo que te aqueja, y poder estar más activo en el día a día. Además mejora tu imagen, creando una sensación de plenitud y aceptación de sí mismo.
¡Nuestro corazón, no es una alacena donde podamos guardar todas nuestras emociones!
Recuerda que, cuando la boca calla……. ¡El cuerpo lo grita!.
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Leo sus comentarios. Saludos…….
CEO del Centro de Estudio y Consultoría Empresarial “Hadraja”.
Conferencista de alto impacto y Escritor, con más de 16 años de experiencia docente, 6 como Conferencista y Capacitador Empresarial en diversos temas y Escritor de temas académicos.