Plan de supervivencia para pequeñas empresas

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Artículo publicado originalmente en el blog de su autor.

¿Tu negocio se está quedando sin dinero y sin esperanzas? ¡No te rindas! Aún puedes sobrevivir. Incluso si te has quedado sin dinero y estás completamente sin esperanzas, es posible que tu negocio pueda sobrevivir pudiendo emerger como un negocio más fuerte que el que tenía antes.

No importa cuán sombrías parezcan las cosas ahora, tu negocio puede sobrevivir y crear un modelo de negocios aún más sólido al mismo tiempo. He aquí cómo hacerlo.

Lo primero que debes hacer: Mantener la calma.

Cuando llegan los momentos más sombríos es cuando es más necesario mantener la  calma. Es verdad que quedarse sin dinero es malo, pero toma en cuenta que no es tan malo como otras cosas como sufrir un grave accidente, pues aún puedes hacer algo. 

Para ver las potenciales soluciones y tomar las decisiones adecuadas, primero debes permanecer en calma. No puedes sumergirte a analizar el problema, sin antes aclarar tu mente y prepárate para un pensamiento profundo.

Tómate un día para digerir la situación antes de poder trabajar en una solución. Quizás estés pensando en este momento: “¿Cómo diablos puedo calmarme cuando la crisis amenaza con poner fin a mi negocio y convertir mi vida en un infierno?”. 

No me malinterpretes, no espero que alcances un estado Zen y estés totalmente calmado, pero sí espero que puedas calmarte lo suficiente como para que puedas pensar con claridad y comenzar a trabajar en un nuevo plan para mejorar tu modelo de negocio.

Una de las cualidades más importantes que los ejércitos del mundo buscan desarrollar en sus unidades de élite, es precisamente la capacidad de mantener la calma ante situaciones caóticas, estresantes, de mucha incertidumbre y altamente riesgosas para  poder tomar decisiones adecuadas. No es de extrañar el porqué muchos de los miembros de estos grupos de élite al pasar a retiro se convierten en exitosos empresarios. 

Tómate el tiempo para crear un nuevo plan: 

Sólo tienes que encontrar el tiempo para crear un nuevo plan. Sé que en este punto puede parecerte imposible encontrar el tiempo suficiente para armar un cuidadoso plan de supervivencia, pero tienes que tomarte el tiempo para hacerlo.

Probablemente implicará trabajar día y noche durante unos días para elaborar un nuevo plan, pero si en tu mente puedes permanecer optimista de que sobrevivirás hoy y prosperarás mañana, es más fácil mantener la energía para crear un gran plan.

Olvídate de cómo manejaste el negocio ayer, hoy es un juego totalmente nuevo:

Existe una mentalidad básica que recomiendo: «Planificación desde cero». En otras palabras: El pasado es pasado. Olvídalo. No va a funcionar ahora, comienza sin suposiciones. Comienza con una hoja de papel en blanco.

En otras palabras, no inicies pensando en recortar personal, reducir costos, gastos generales, etc. Tal vez, igualmente llegue a esos puntos, pero no empieces por ahí. En cambio, comienza por rediseñar tu modelo de negocio por completo. Y lo vas a diseñar para que sobreviva más allá de este difícil momento. 

Necesitas un plan de supervivencia que debe funcionar durante los próximos 12 a 24 meses, no sólo durante un par de semanas. Ése es el período mínimo que muchos economistas estimamos que puede tardar en recuperarse completamente una empresa de una crisis económica.

Involucra a tus empleados clave:

Si tienes algunos empleados clave, puedes decidir involucrarlos por completo en todos los pasos para crear el plan de supervivencia. Puedes empezar haciendo tú mismo la mayor parte del trabajo para crear un plan de supervivencia por tu cuenta. La velocidad y la rápida toma de decisiones difíciles de gran alcance son importantes. Haz todo lo que tengas que hacer para encontrar un momento de tranquilidad, fuera de la oficina y poner en marcha tu planificación. 

Luego, una vez que tengas un plan básico, preséntalo a tus empleados clave, obtendrás sus comentarios y modificarán el plan. Tu plan puede cambiar significativamente después de recibir los comentarios de tus empleados, pero incluso si el plan no cambia mucho, es importante que ellos sientan que tienen una voz y que sus opiniones son escuchadas.

Si tienes un equipo de empleados realmente talentoso y altamente involucrado, puedes decidir involucrarlos completamente desde el principio. Esto, por supuesto, puede complicarse si incluso una parte de la discusión llega a eliminar temporalmente tus posiciones. Así que piensa en este enfoque antes de embarcarte en él. Debes elegir qué enfoque te funcionará mejor.

Si tienes que hacer recortes, hazlo todos de una vez:

No querrás estar en una situación en la que lentamente decidas recortar un poco este mes esperando a que esta crisis termine rápido. Y luego vuelves a entrar en crisis el mes que viene y tienes que recortar un poco más, y así sucesivamente. Las crisis no terminan de la noche a la mañana. Eso es una fantasía. Necesitarás tiempo para volver a una situación normal. En cambio, rediseña tu negocio para que pueda sobrevivir por un largo período. 

Es probable que los recortes impliquen algunas decisiones dolorosas. Tal vez no puedas atender a los clientes que no puedan pagar por adelantado. Tal vez debas abandonar una línea de productos de lento movimiento. Quizás tengas que reducir su personal.

Es mucho mejor hacer un rediseño completo de tu modelo de negocio lo antes posible, en lugar de hacer un recorte incremental tras otro. Más adelante, a medida que descubras que tu negocio está ganando fuerza, puedes considerar volver a agregar aspectos que estás recortando ahora.

Deja de pagar algunas facturas:

Casi todas las empresas que entran en crisis tienen dificultades para pagar sus facturas en el momento, tu empresa no tendría porqué ser la excepción. Deja de pagar algunas de tus facturas. Los acreedores entienden que cuando una empresa entra en crisis hay un riesgo de que no pagará sus facturas. 

Uno de mis clientes recibió una carta de su arrendador diciendo que esperaban que siguiera pagando el alquiler. Entonces me dijo que todavía tenía que pagarlo, ¡Pero la razón por la que el propietario envió la carta es precisamente porque no espera que pague el alquiler! O al menos espera que haya una buena posibilidad de que no pague el alquiler. Al menos, no en este momento.

Para ser honesto, desde una perspectiva legal, es cierto que estás asumiendo riesgos si no pagas tus facturas. Pero si no puedes pagar tus facturas o todas tus facturas, entonces no puedes pagarlas. 

No hay nada de deshonroso o de poco ético en no pagar tus facturas si no puedes hacerlo. Es posible que los acreedores puedan emprender acciones legales, pero en la mayoría de los casos, la acción legal no comenzará rápidamente. Es el tiempo que necesitas para recuperarte y saldar tus deudas y lo vamos a tomar en cuenta en nuestro plan de supervivencia.

Entonces, empecemos a desarrollar ese plan que te ayudará a superar la actual situación.

Plan de Supervivencia:

Este es un plan de supervivencia básico para pymes en 6 pasos: 

Paso 1: La estrategia de cómo asegurar el flujo de caja del negocio.

La máxima prioridad es el flujo de caja. Es difícil abarcar todos los tipos de negocios en un limitado artículo como este, pero espero que poniendo un ejemplo, el lector podrá extrapolarlo al modelo de negocio particular de su empresa. 

Por ejemplo, supongamos que esperamos que la demanda de nuestro producto “A” durante la temporada de verano disminuirá drásticamente en algún punto en el rango entre el 30% al 50% y que con nuestro presupuesto actual, incluso una disminución del 30% haría que el negocio no fuera viable. Con una disminución del 50%, la empresa estaría perdiendo dinero tan rápidamente que agotaría las pocas reservas que nos quedan en días. Por lo tanto, necesitamos un cambio para aumentar el flujo de caja. Podemos hacernos algunas preguntas:

  • ¿Existe la posibilidad de empezar a ofrecer un nuevo producto “B” que sabemos tiene demanda actualmente? 
  • ¿Sería posible redirigir parte de la capacidad que tenemos para producir el producto “A” para el producto “B” sin requerir de mayores costos?
  • Si reducimos nuestras tarifas para el alquiler de nuestro producto “C” ¿Aumentaría los ingresos totales al alentar a las personas a alquilar más veces este producto y por períodos de tiempo más largos?
  • ¿Sería posible poner en venta algunos activos no necesarios al costo o incluso más bajo si es necesario?
  • ¿Es posible reducir nuestros costos publicitarios eliminando canales publicitarios menos efectivos que podrían no ser rentables con una demanda tan reducida?
  • ¿Pudiéramos recortar nuestras horas de funcionamiento durante la temporada baja cuando la demanda sea baja?
  • ¿Qué elementos del presupuesto podemos omitir o reducir en este momento?

Paso 2: Plan de priorización de facturas.

Si debemos mantener efectivo en caja de “X” cantidad. Primero pagaremos el impuesto sobre las ventas, ya que realmente los impuestos sobre las ventas no son facturas, son dinero que tengo en custodia para el gobierno, por lo que pagarlos es una prioridad muy alta.

Por otra parte, seguramente igual que yo, también odiarás no pagar el alquiler al propietario, pero ahora no tenemos suficiente dinero. Entonces, llamaremos al arrendador y le diremos que no tenemos el dinero ahora, pero que tenemos un plan que ayudará a la supervivencia del negocio y que sólo podemos pagar la mitad del alquiler y haremos todo lo que podamos para ponernos al día lo antes posible.

Al mayorista le preguntaremos si podemos devolver los productos comprados recientemente a cambio de crédito, ya que ahora anticipamos una menor demanda. Luego, si no podemos, les diremos que tendrán que esperar el pago hasta que podamos vender parte del exceso de inventario del producto.

Con el banco, llamaremos al ejecutivo de cuentas y le contaremos sobre el plan de supervivencia para mi negocio. Le aseguraremos que el banco será reembolsado eventualmente, pero durante los próximos 90 días, no podremos realizar ningún pago.

No ignores a tus acreedores y prestamistas, pero primero ten listo tu plan de supervivencia. Si no puedes pagarles ahora, diles que tienes un plan. Si sabes cuándo definitivamente puedes pagar, díselo. Si no lo sabes, no prometas una fecha. Pero trata de estar en una situación en la que puedas prometerles que sobrevivirás y que les pagarás. Se seguro y genuino. Muchas empresas también tienen problemas de flujo de caja en este momento. No tienes nada de qué avergonzarte.

Paso 3: Crea un nuevo presupuesto para el período de crisis.

Crear un nuevo presupuesto puede ser mucho trabajo. ¿Cuán detallado debería ser? ¿Durante cuántos meses debería crearlo?

Tu nuevo presupuesto mensual debería ser bastante detallado. Cuanto más detallado sea, más podrás reducir gastos. Es preferible arriesgarse a ser demasiado detallado en lugar de no ser lo suficientemente detallado al proyectar tu flujo de efectivo. Que tus proyecciones de estados financieros sean detallados no es tan importante en este momento de crisis. El efectivo es lo más importante.

Para una empresa de servicios de una sola persona, puede ser suficiente realizar tres meses de proyecciones y sólo necesita un conjunto de proyecciones: su escenario más probable. Para un negocio de productos más complejos y de varias personas que depende del financiamiento bancario, es posible que debas hacer proyecciones para 12 meses y probablemente desees crear tres conjuntos de escenarios: un escenario de caso probable, un escenario de caso pesimista y un escenario de caso optimista.

Paso 4: Toca cualquier fuente de financiación posible.

Toque a las puertas de nuevas fuentes de financiación. En muchos países, las agencias gubernamentales están aumentando drásticamente el apoyo financiero y los préstamos para las pymes en este momento. 

Más allá de eso, hay una increíble cantidad de formas diferentes de financiar una pyme, y aunque por lo general puede ser difícil financiar una empresa en problemas, muchos financistas pueden en algunos casos, ser más comprensivos durante esta situación que ya están acostumbrados a ver. 

No estoy diciendo que obtener financiamiento sea fácil, pero se puede lograr. Especialmente si estás dispuesto a acercarte de manera cuidadosa y profesional a una variedad de posibles fuentes de financiamiento. Sin embargo, si el tiempo es esencial, que a menudo lo es en estas situaciones, es posible que desee considerar primero el financiamiento de amigos y familiares.

Paso 5: Presta atención al factor humano.

Se justo con los empleados que tenga que dejar ir. En primer lugar, debes reunirte por separado con cualquier empleado que estés despidiendo, despidiendo temporalmente o reduciendo sus horas de trabajo. Debes reunirte con ellos en persona, uno por uno si es posible. Luego, explícales de una manera amable tu difícil situación y lo que significará para ellos. 

Si los vas a despedir, es de esperar que puedas ofrecer algún tipo de indemnización por despido o extender los beneficios durante al menos un período corto de tiempo. Si bien puedes estar muy ocupado o distraído, es importante tomarte el tiempo y la energía para transmitir esta difícil noticia con el mayor cuidado posible. Por un lado, la forma en que entregues las noticias afectará a otros empleados que no serán despedidos. Y por otro lado, es lo correcto.

Luego, deberás reunirte con los empleados restantes en una reunión grupal o en persona. Comunícales que ahora tienes un plan de supervivencia cuidadosamente desarrollado para que el negocio navegue este difícil momento. En especial, asegúrales que crees que no tendrías que hacer ningún recorte de empleos en el futuro y que sus empleos en la empresa deberían ser seguros.

Luego, puedes explicar los cambios que estás realizando en la empresa. También te recomendaría que les pida ayuda para aumentar los ingresos, disminuir los costos o ambos. Incluso considere ofrecer premios en efectivo por sugerencias de reducción de costos. Y finalmente, responda a cualquier pregunta que la gente pudiera tener. 

Paso 6: Contacta a tus clientes.

Tienes que ponerte en el lugar de tus clientes y pensar en cómo ven tu negocio ahora. Conversa con ellos sobre cómo ha cambiado el negocio y cómo manejarás las cosas de manera diferente ahora. La forma en que tratas a tus clientes en este momento de crisis podría definir tu negocio durante años, así que haz lo mejor que puedas.

Como dijo Winston Churchill, «Nunca deje que una buena crisis se desperdicie». Una buena crisis es un momento maravilloso para repensar algunos de los conceptos, supuestos y paradigmas básicos sobre tu negocio. Una crisis abre nuestra mente para hacer las cosas de nuevas formas y, francamente, simplemente abrir la mente a nuevas posibilidades es una de las mejores oportunidades para mejorar radicalmente el desempeño de una empresa, especialmente una pequeña empresa.

Si estás pensando en una consultoría estratégica, comprar o vender un negocio o si necesitas discutir tus opciones con un especialista, no dudes en contactarme.

Econ. Roger Garcia.

Artículo publicado originalmente en el blog de su autor.

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