Se sabe, la comunicación es estratégica cuando logra reunir los principales lineamientos de la organización en un conjunto de normas y actividades concretas destinadas a alcanzar los objetivos propuestos. Por ello, es importante que podamos revisar esos objetivos, teniendo en cuenta la estructura real de nuestra empresa.
Muchas veces se comete el error de emular los objetivos organizacionales de empresas que estan mejor posicionadas, son más grandes, o cuentan con más recursos económicos, trayectoria, y un largo etc. Ser la empresa lider, o proyectar un posicionamiento regional quizá resulte una buena idea, pero ¿es estratégico? ¿esos objetivos son viables? ¿Nuestra organización está preparada para llevar adelante tamaños retos?
Lo cierto es que existe mucha literatura acerca de la comunicación corporativa y el management en empresas trasnacionales o grandes corporaciones, pero muy poca o escasa acerca de cómo implementar un buen programa de comunicación para pequeñas y/o medianas empresas. Por ello, comparto tres recomendaciones para pensar la Comunicación en términos estratégicos, en organizaciones de pequeño y mediano tamaño.
1) Optimizar procesos.
Atender los procesos de gestión en términos comunicacionales significa volverlos más eficientes. ¿Cómo se estructura la informacion de la empresa? ¿Existen canales, actividades, y roles claros para los integrantes? ¿Se atienden los reclamos o sugerencias de nuestros colaboradores internos o externos? ¿Se elaboran reportes de gestión? ¿Hay algún responsable directo encargado de integrar las áreas, encontrar nuevas oportunidades de negocio, comunicar?
2) Conectar con nuestro cliente/audiencia.
Trabajar en el valor agregado que ofrecemos a nuestros potenciales y actuales clientes es pensar la comunicacion en términos estratégicos. El objetivo es mejorar la experiencia, siempre, y para lograrlo, deberemos desarrollar una comunicacion lo más personalizada posible. En este sentido, la omnicanalidad que ofrece el nuevo entorno digital resulta una oportunidad para tender puentes y reconectar de un modo más genuino con la audiencia. De paso, se pueden aprovechar muchas herramientas que nos van a permirir conocernos mejor como organización y a nuestros clientes: el uso y análisis inteligente de datos es sin lugar a dudas una de las muy buenas, útiles y accesibles.
3) Pensar en términos de ecosistema.
El alcance y potencialidad que tiene un buen mapeo comunicacional de nuestro entorno pareciera no ser conocida por la mayoría de los directivos o dueños de pymes. El mapa nos permite priorizar los vínculos y ser conscientes de la importancia de sosterner un sano tejido de relaciones. Los eventos, la mayor presencia y cercanía con los stakeholders, las acciones de RSE o la colaboración que podamos efectuar con alguna institución o causa en nuestro entorno físico, sin dudas fortalecerá la identidad de la firma y trabajadores.
La comunicacion es estratégica cuando se la inviste de significado. La clave sigue siendo la diferenciación. Desarrollar un lineamiento integral tomando como punto de partida los tres ejes de trabajo propuestos, nos va a permitir ser más eficientes, alcanzar mayores niveles de distincion, y cultivar un verdadero ámbito de pertenencia sobre la base de propósitos que otorgan sentido. De este modo, nuestra organización se valoriza, y crece de forma más natural.
Vladimiro Amigo es licenciado en ciencias de la comunicación, Magister en administración y dirección de empresas, y en comunicación empresarial y corporativa.
