La vida organizacional y económica en los últimos tiempos ha evolucionado a pasos agigantados. La estructura de tipo cerrada, donde la organización era un sujeto con límites determinados, cedió lugar a una organización abierta que se fusiona con la cadena de valor de la que forma parte, e incluso la comunidad o mercado que integra.
Liderar redes organizacionales requiere de varias habilidades. Entre ellas podemos observar:
1) Reconocer y orientar todos los recursos mancomunados al logro del propósito, misión y visión de la red; a la vez de respetar e integrar los propósitos, misiones y visiones de todos sus integrantes.
2) Velar por los valores compartidos de la red y de cada integrante de la misma.
3) Coordinar planificaciones, proyectos y acciones diariamente.
4) Habilidades comunicacionales, que se manifiestan en la capacidad de gestionar información, fundamentar opiniones, declarar objetivos y comprometerse con su realización, emitir y cumplir promesas, realizar pedidos y ofertas efectivas.
5) Habilidades emocionales y sociales. Dentro de estas habilidades encontramos la capacidad de gestionar las propias emociones (reconocerlas, aceptarlas, vivenciarlas, analizar y responder a ellas en forma inteligente) y de facilitar la gestión emocionar en los otros, como así también habilidades relacionadas con la motivación personal y de equipos, empatía y de relación.
6) Gestión de la realidad en la que está la red y las distintas realidades en la que se encuentran cada uno de los integrantes. Esto unido a la capacidad de comprender que cada “realidad” responde a la interpretación de cada integrante de la red de lo que observa, de la información que dispone, de sus propias circunstancias y de su propia forma de ver el mundo.
7) Conectar culturas a través de la construcción de puentes interculturales.
8) Motivar a todos los integrantes de la red tras propósitos comunes.
9) Generar posibilidades y gestionar contingencias.
10) Reconocer y facilitar la autoridad compartida. Liderar una red no significa dirigirla de la manera tradicional, sino facilitar los liderazgos de cada integrante.